lunes, 9 de diciembre de 2013

Constitución

Mucho se está hablando de cambios más o menos profundos en la Constitución de 1978. Para unos, nuestra joven Constitución está bien para los tiempos que corren. Para otros, les corre una prisa enorme en su cambio para adaptarla a sus pretensiones. Y para otros más, los cambios perentorios que la Constitución necesita es convertirla en una Constitución federal. Cada uno trabaja intentando llevar el ascua a su sardina y procurando que cada vez sean más los españoles que están de acuerdo con sus respectivas tesis. Este fenómeno tiene cada vez más adeptos.

Si se realizara una encuesta a nivel nacional, sin preparar, preguntando qué tipo de cambios necesita, estoy seguro que muchos de los encuestados contestarían lo primero que se le ocurriese, sin profundizar. Creo que en la mente de los españoles hay preocupaciones más importantes, por el momento, que un cambio drástico de la Constitución Española, que adaptarla a las pretensiones según intereses.
Nuestra Constitución contempla en su articulado una cuasi-federación en su denominación, ya que las actuales autonomías de nuestro país son casi un reflejo de ellas en cualquier país que contemple este tipo de organización política, como por ejemplo Alemania. Pero con la consiguiente diferencia. Las autonomías españolas tienen en si mismas más poder que aquellos países federados de nuestro entorno democrático. Nunca en la historia de España las autonomías o regiones habían acumulado tal nivel de poder. De ahí, que un cambio drástico o federal ¿hacia dónde nos llevaría?. De hecho, si buscamos la palabra federación o confederación en cualquier enciclopedia nos dice que es la asociación voluntaria de estados que cuando lo considerasen necesario pueden separarse del ente matriz, o sea, de la federación.
La Historia nos ha demostrado que los españoles somos unos insolidarios y cainitas con nosotros mismos y tras los movimientos separatistas que comienzan a florecer en los últimos años: País Vasco, Cataluña....¿cuál o cuáles seguirán?...¿llegaremos los huercalenses a independizarnos?, la mejor manera de que sigamos unidos es aplicar taxativamente las leyes que se contemplan en el articulado de la Constitucion de 1978, no obviando que ella puede afinarse en aquellos aspectos que hayan podido quedar obsoletos. Nunca cambios que propiciasen la desmembración de la Nación más antigua de Europa, que es el objetivo prioritario que persiguen los grupos nacionalistas catalanes y vascos.


Foto.- Año 2007. Celebración del tradicional Día de Convivencia organizado por la Asociación de Vecinos 'La Fauna' de la barriada de La Molineta.