martes, 27 de mayo de 2014

Resultados Europeas

El descalabro de los partidos mayoritarios ha sido mayúsculo. Por muchas reflexiones que nos quieran ofrecer para 'encortinar' lo ocurrido, la cruda realidad está ahí, clara, precisa, concluyente y punto de partida de una recuperación del electorado. No sirve esconder la cabeza como los avestruces y decir que no ha pasado nada. Todo ello se veía venir, fruto de una mala praxis política llevada desde las grandes formaciones y que en la mayoría de los casos no se ha explicado con toda claridad. El electorado de 2014 no es el mismo que el del 2009. Se ha ido curtiendo con la realidad cotidiana y exigen un cambio, en la política en sí y en la forma en que se hace.

viernes, 23 de mayo de 2014

¿Debemos votar?

La celebración de las elecciones europeas no ha creado un clima propicio en la calle, ni ninguna expectativa. Nadie habla de este tema. Me da la impresión que van a pasar sin pena ni gloria, excepto por un detalle, que posiblemente sean las que obtengan el máximo porcentaje de abstención y votos nulos.

miércoles, 14 de mayo de 2014

A vueltas con el AVE

Definitivamente, si nadie lo remedia, la provincia de Almería podría quedarse sin la línea ferroviaria del AVE, la cual, en un primer momento fue una promesa de los socialistas y posteriormente de los populares. Los primeros lo imcumplieron en su momento y los otros, están a punto de incumplirlo si el Ministerio de Fomento acepta la propuesta de Adif de reducir la inversión en la terminación de la línea y posponerla para después del año 2018.

lunes, 5 de mayo de 2014

Gabinetes de comunicación

Hoy en día vivimos en la era de la información-desinformación, ya que nos pintan los acontecimientos acorde a qué medio de comunicación nos los ofrezca y siempre teniendo en cuenta quién está gobernando en ese momento, dándose la paradoja de que medios afines a cada uno de los lados oscuros de la política, le dan caña al propio y no al extraño. La manipulación de la información es patente, jugando un papel muy importante los intereses económicos. Al final se demuestra que el poderoso don dinero es quien manda.